Luis Rubiales, el presidente suspendido de la Federación Española de Fútbol (RFEF), comunicó hoy su renuncia debido al incidente del beso no consensuado a Jenni Hermoso tras la victoria del equipo nacional en el Mundial femenino.
«Voy a presentar mi dimisión, sí, porque no deseo seguir en mi cargo», adelantó Rubiales en una entrevista en el programa de televisión británico Piers Morgan Uncensored. «Mi familia y amigos me aconsejan que debo preservar mi dignidad y seguir adelante con mi vida, ya que de lo contrario causaría daño a las personas que aprecio y al deporte que tengo tanto cariño», señaló.
La prensa española informó poco después sobre una carta en la que Luis Rubiales expresó que ya ha presentado oficialmente su dimisión al presidente en funciones de la RFEF, Pedro Rocha.
«Hoy, a las 21:30 horas [19:30 GMT], he comunicado oficialmente al presidente en funciones, D. Pedro Rocha, mi renuncia al cargo de presidente de la RFEF. Además, le he informado de que he tomado la misma medida con mi puesto en la UEFA, permitiendo así que mi posición en la vicepresidencia sea remplazada», comienza el mensaje de Rubiales.
«Después de la rápida suspensión por parte de la FIFA y los demás procedimientos en curso en mi contra, es claro que no podré regresar a mi puesto. Persistir en quedarme en espera y aferrarme a ello no sería beneficioso en absoluto, ni para la Federación ni para el fútbol español. Entre otras razones, porque existen influencias poderosas que impedirán mi retorno», prosigue el comunicado.
Rubiales reafirma su deseo de que su renuncia contribuya a la estabilidad del fútbol español y al respaldo de la candidatura conjunta de España, Portugal y Marruecos para la organización del Mundial de 2030.